Pienso. Mucho. Pienso cuántas veces nuestra imaginación genera historias que chocan con la realidad. Una realidad que no es buena ni mala. Es. Es la que es.
Pienso. Mucho. Pienso cuántas veces esperamos que el otro sea de la forma en la que lo soñamos, lo construimos, lo idealizamos. Es como una especie de proyecto unipersonal, como el diseño del prototipo perfecto que venimos pergeñando hace tiempo.
Pienso. Mucho. Pienso cuántas veces desechamos algo por ser contradictorio a lo que maquinamos.
¿Y si esas diferencias fueran la clave?
Me gusta lo diferente. Me gusta lo que no responde a mis cánones. Me gusta lo que escapa a lo ordinario, a lo que debe ser, a lo conveniente, a lo pertinente. Apostar a lo que nadie apuesta. Dar una oportunidad. Ver un sol que asoma en donde otros pronostican mal tiempo.